Auto-control

• Auto-control
• Todo estudiante que haya entrado al Sendero Consciente y desea proceder y ser bendecido por esaMaravillosa y Poderosa Luz anclada en el corazón de cada uno, debe apartarse de toda crítica y juicio de la misma manera en que se apartaría de una víbora que, de picarle, le inyectaría un veneno mortal en el cuerpo. El estudiante debería entender que al permitirse caer en este indeseable hábito, no hace más que herirse así mismo. Nadie puede hacer le daño a otro que está lleno de amor hacia todos y todas las cosas, porque la Conciencia de la Actividad del Amor Divino en la vida del individuo erige una Magna Armadura de Protección que nada de lo externo puede penetrar -ya que Dios es Amor y siempre protege a los suyos. 
• Los estudiantes que hayan tenido dificultades para controlar sus pensamientos y sentimientos armónicamente deberían entender que al entrar bajo esta Radiación se aceleran tremendamente todas las facultades de su ser. Por ello, son más sensibles tanto a lo indeseable como a lo bueno y deseable. Pero no puedo hacer el suficiente énfasis sobre el particular de que TODOS, AL CONTAR CON LIBRE ALBEDRÍO, TIENEN EL PODER PARA GOBERNAR Y CONTROLAR CÓMO HABRÁN DE PENSAR Y SENTIR. Todos deberían mantener esta verdad frente a sí en cada momento.
• Todo aquel que difunde un chisme -sea verdad o mentira- no solo se hace daño a si mismo sino que a menudo le cierra la puerta a aquellos que desafortunadamente aceptan el chisme y se espacían en él. De manera que quienes cedan al chisme deben entender cuán trascendental es el daño que se hacen así mismos y a sus amistades. La vertida consciente del Amor Divino en todas las situaciones permitirá a aquellos que estén adictos a tal hábito a encontrar una rápida y total liberación de estas condiciones. Me regocijo sobremanera cuando alguien que tiene una gran fortaleza interna es capaz de resistir y rehusar cualquier sugestión sutilmente destructiva, y de pararse firme con (y en) la Magna Presencia de su Glorioso Ser Divino. Mantengan el paso, mis amados, y llegarán a escuchar las Campanas de la Liberación, de la Libertad, sonando para ustedes en el Gran Ritmo de la Luz Eterna.
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De, "Instruccion de un Maestro Ascendido. Maestro Ascendido Saint Germain. Discurso XXIV."