LA MAESTRÍA DE LOS CUATRO CUERPOS INFERIORES

Nosotros esperamos -dijo un Maestro- que el estudiante
escoja transformar su naturaleza, inclusive cuando sirve. No
podemos pedirle que lo haga. Basta y sobra con el hecho de
que, imperfecto como pueda ser, él se ha ofrecido a servir. Si
también escoge perfeccionarse mayor será el milagro por el
que agradecemos al Señor de las Huestes
«Los talentos actuales pueden utilizarse para el trabajo del
momento. El chela determina, dentro de si, desarrollar
mediante Aplicación individual, una mayor conciencia
madura, dependiente e iluminada; y un conjunto de
vehículos purificados para ofrecérselos al Maestro. Se
compromete en un curso de auto-disciplina y autopurificación espiritual.
"Cuanto más cada chela pueda (y se esfuerce por) mejorar,
corregir y perfeccionar los defectos y fallas más evidentes que
aparentemente están en su propia alma-luz, tanto menos
tendremos que sufrir del prejuicio y la conciencia fanática de
la raza que nos evalúa por nuestros chelas. Así que podemos
decir que mientras el chela aprende y sirve, debe procurar la
maestría de sus cuatro cuerpos inferiores. De este modo, el
chela se convertirá en un activo mucho mayor para la causa
de la Hermandad.  

De, "Metafísica. 21 lecciones esenciales. Volumen 3"